A Jurgen Klopp empiezan a multiplicársele los problemas a falta de dos semanas para la final de la Champions. Mohamed Salah abandonó la final de la FA Cup a la media hora por lesión. La estrella del Liverpool no pudo continuar en el partido ante el Chelsea, después de sufrir unos problemas en el aductor que le hicieron pedir el cambio y marcharse con claros signos de dolor y de frustración. Con la presencia en el aire de Fabinho, que sufre una lesión en los isquiotibiales, ahora se complican aún más las cosas para los de Anfield con los problemas del egipcio, que pasa a ser también duda para París.
Corría el minuto 30 de partido en Wembley, en el desenlace de la competición más antigua del mundo, cuando Mo Salah se iba al suelo. Los médicos entraron a atenderle, pero en su cara y en las de sus compañeros se veían claros signos de preocupación. No podía continuar y, aunque salió andando por su propio pie, Klopp tenía que dar entrada a Diego Jota en su lugar.
El jugador es el mejor delantero de la Premier League esta temporada, tal y como demuestran sus números y, como ha revelado Ancelotti, el mejor del mundo en su posición. Además, después del percance sufrido en la final de Kiev en 2018 ante los madridistas, tiene ganas de revancha. El propio Salah ha revelado que le motiva disputarse la Copa de Europa ante el Real Madrid pero ahora su participación está en el aire.
El Liverpool continúa teniendo todo en juego en este tramo final de temporada y está obligado a no fallar en los dos partidos que le quedan por delante antes de la final de la Champions. La presión es máxima para unos reds que quieren revalidar el título de la Premier League del pasado año, aunque necesitan no fallar y que sí que lo haga el Manchester City de Guardiola. Antes del partido de París, deberán medirse primero al Southampton y a los Wolves.